¿Llevas años en el sector de las reformas, pero tu negocio no acaba de despegar? ¿Tuviste una época de bonanza, pero ahora pasas por una de vacas flacas?
Pero, pero… ¡y dale con el pero! Ha llegado el momento de aparcar las excusas. Todos los negocios pasan por altibajos. La clave para superarlos es no quedarse de brazos cruzados y actuar a tiempo.
Existen muchas acciones estimulantes para los negocios que se encuentran de capa caída. En este artículo, nuestra misión es mostrarte seis de las que mejor funcionan con empresas de reformas. ¡Al tajo!
Publi, publi y más publi
Aunque no seas consciente de ello, tu empresa de reformas ya está apoyada por algún tipo de publicidad. Por ejemplo, el boca a boca, que además es lo más efectivo en este sector. Sin embargo, aún tienes todo un mundo de posibilidades por explorar. Y, al contrario de lo que puedas creer, no todas tienen un coste elevado.
Los medios de comunicación locales, como las revistas y emisoras de radio, son una gran apuesta cuando notas que aflojan las llamadas. Garantizan que llegas a potenciales clientes que están cerca de ti y necesitan tus servicios.
La publicidad impresa y de exterior también te puede resultar útil para reactivar el ritmo de trabajo. Reparte flyers en lugares concurridos de tu zona o alquila vallas publicitarias para contarle a los vecinos qué es lo que puedes hacer por ellos.
Formación y reciclaje interno
Si los problemas y gustos de tus clientes cambian, ¡también deben hacerlo tus capacidades profesionales! Y el único modo de hacerlo es poner tu mente en modo “aprendizaje continuo”.
¿Conoces cuáles son los tonos de moda para las paredes de tus clientes? ¿Y los nuevos materiales, más resistentes y económicos? ¿Y qué hay de las herramientas de hoy en día, que pueden mejorar tu precisión y ahorrarte mucho tiempo?
Si no quieres quedarte anclado para siempre en el gotelé… ¡Muévete! Internet es una jungla llena de vídeos, artículos y trucos para los profesionales de las reformas.
Delegación de responsabilidades
A veces, no es tanto cuestión de dinero como de tiempo. ¿A qué nos referimos? Todas las horas que inviertes en la búsqueda de clientes y la emisión de presupuestos son tiempo que le restas a la actividad que ingresa dinero en caja: las reformas, la limpieza, el mantenimiento o aquello a lo que te dediques.
Por eso, es una buena idea confiar en un profesional para desarrollar todas esas labores y concentrarte en lo que mejor sabes hacer. KUIKO te ofrece una amplia variedad de servicios para ahorrar tiempo sin cuotas mensuales ni pagos previos:
- Visibilidad gratuita en la plataforma para encontrar nuevos clientes.
- Generación automática de presupuestos a medida con tus tarifas.
- Filtrado y contacto con los clientes realmente interesados en contratar.
- Facturación automática y gestión digital del trabajo.
Revisión y actualización de servicios
Párate un segundo a pensar cuánto ha cambiado la pandemia nuestros hogares. Ahora, todo el que puede invierte en ampliar su terraza o abrir espacios. ¿Ofrece tu empresa lo que buscan hoy en día los clientes? Y, si es así, ¿lo saben ellos?
Dale un repaso a tu portfolio de servicios e incluye lo que más demandan los clientes. Ese simple gesto le asegurará un buen empujón a tu empresa de reformas, pues ganarás en credibilidad sin apenas esfuerzo (y ningún desembolso económico).
Creación de comunidad y red de contactos
Como te hemos adelantado al comienzo de este artículo, el boca a boca es uno de los medios más efectivos para llegar a más clientes con tu empresa de reformas. ¡Aprovéchate de él!
Primero, selecciona los clientes que más satisfechos estén con tus servicios. Después, anímalos a dejarte una reseña o repárteles tarjetas de visita para que se las entreguen a amigos y conocidos interesados en reformar sus hogares.
El crecimiento con esta estrategia es lento, pero seguro. ¡No hay nada que valga más que la palabra de un amigo al contratar un servicio de reformas!
Selección de proyectos
Uno de los mayores sumideros de dinero en cualquier negocio son los malos clientes. Con esto nos referimos a los clientes que regatean, que no pagan, que lo hacen tarde o que reclaman más servicios de los inicialmente acordados en el presupuesto de reformas.
La diferencia entre un profesional joven y uno experimentado es que sabe identificar estos clientes y decir que no a sus propuestas o reconducir las condiciones para que reviertan en un beneficio mutuo.
En resumen: invierte en publicidad, no dejes de formarte, delega responsabilidades, actualiza tus servicios, establece una red de contactos y selecciona mejor tus proyectos. Si sigues estos seis consejos, tu negocio de reformas recuperará el éxito que tuvo antaño (o incluso más).