Facturas, presupuestos, libros de cuentas… Lo sabemos, se te pone la piel de gallina cada vez que escuchas uno de estos términos. Y es que lo tuyo son las reformas. El trabajo administrativo es solo un requisito más que viene en el pack de tener un negocio.
En KUIKO trabajamos para liberarte al máximo de esa carga y que te concentres en lo que realmente eres bueno. No solo ahorrándote tiempo en la búsqueda de clientes, sino compartiendo contigo plantillas como la de Plan de negocios para una empresa de reformas.
En esta ocasión, ponemos sobre la mesa otro documento con el que vas a tener que convivir toda tu vida profesional: los presupuestos. Aquí aprenderás por qué son tan importantes y cómo elaborarlos correctamente. Al final de este artículo, encontrarás una plantilla descargable con la que te animamos a practicar para tu próximo proyecto. ¿Comenzamos?
Los presupuestos son una declaración de intenciones. Fijan las expectativas de ambas partes en un proyecto de reformas y evitan sorpresas desagradables. Benefician tanto al cliente como al proveedor de servicios.
Para el cliente, son la manera de acotar el precio del servicio que van a recibir. Después de transmitir sus necesidades, espera que le envíes por escrito una confirmación de que verá cumplidos sus deseos. Un presupuesto profesional le aporta seguridad y tranquilidad a tu cliente. Hace que confíe en ti.
Imagina que comienzas a pintar un piso sin enviar antes el presupuesto. Quizás el cliente desconozca por completo el precio de la pintura o no valore como tú el coste de la mano de obra. Al terminar el trabajo, puede sentirse “estafado” porque el ticket es demasiado alto y nunca más recurrirá a ti como profesional. Con un presupuesto de por medio, podría haberte planteado todas sus dudas y entender el desglose del precio.
Los presupuestos también son vitales para ti a la hora de gestionar un proyecto de reformas. De algún modo, te cubren las espaldas frente a malentendidos y te aseguran poder reclamar el cobro íntegro de tus servicios.
Imagina de nuevo ese mismo proyecto de pintura. Tras una simple conversación telefónica, el cliente entiende que pintarás solo las paredes, pero tú entiendes que debes pintar paredes y techos. Y así lo haces. Al concluir el trabajo, querrás cobrar más metros cuadrados de pintura de los que el cliente está dispuesto a pagar. Todo, por un simple malentendido que podría haberse evitado a tiempo.
Al contrario de lo que puedas pensar, tu presupuesto no necesita ser extremadamente elaborado. Cuanto más fácil sea para tu cliente identificar qué servicios recibirá y qué importe pagará por ellos, mejor. Así, evitarás más llamadas y explicaciones. A continuación, te dejamos una lista de los campos imprescindibles en cualquier presupuesto
Esta es toda la información que necesitas para lanzarte a hacer tu propio presupuesto. A continuación, te dejamos una plantilla editable para que le pierdas el miedo a la hoja en blanco.
De todos modos, recuerda que registrándote de manera totalmente gratuita en KUIKO PRO e introduciendo tus tarifas tendrás a tu disposición un generador automático de presupuestos.